En ésta foto con apenas 10 años de edad ya sabía lo que era luchar para ganar.
Mucha disciplina, mucho esfuerzo, mucha dedicación y muchas alegrías, mucha satisfacción y mucho bienestar al mismo tiempo.
Gracias a esto comprendí el valor de las cosas, conocí media España, muchos amigos y me preparó para una vida difícil dónde yo sobreviví por mis manos, mis piernas y mi mentalidad sin la ayuda de nadie.
El deporte te enseña, te aporta, te abre nuevos caminos y te introduce en un mundo fascinante, carreras, viajes, hoteles, gente, ganar y perder, conoces el orgullo y la humildad, conoces tu cuerpo a la perfección,.......
Por eso, cuando me preguntan si mi hijo Iván va a ser ciclista o atleta, por encima de todas las cosas querré que haga algo en lo que el crea como yo en su día aposté por el ciclismo y después por el atletismo, y sé que es duro si se decanta por éstos deportes, pero a la vez sé que aprenderá mucho, aunque no quiero que pase por eso para aprender.
Así que haga lo que haga, yo podré guiarlo porque ya en su día yo sufrí para tener los conocimientos necesarios.
